Aclarar
que yo no consigo nada con esta entrada de blog, la hago porque me pareció
buena idea y para escribir algo dentro de unos márgenes reales de contenido. No
soy crítico musical ni periodista, así que le daré un toque autobiográfico y
personal, y sin marcar un estilo profesional, más bien lo contrario.
Día 1
Justo el
día anterior terminé exámenes tras dos meses bastante duretes, de tener poco
tiempo y poco descanso, así que estaba deseoso de que llegase este momento.
Compré la entrada al siguiente día de que saliesen y por 85 pavos esperaba
aprovechar todo lo que el cuerpo me permitiese.
No
sabía muy bien cómo ir vestido a un festival, no sabía muy bien qué llevar,
además no hacía muy buen tiempo…Decidí ponerme una sudadera, unos vaqueros
normalitos y las jordan que menos me importase manchar, la pulsera del
festival, llaves, cartera y móvil e ya.
18:30,
me recogen en mi calle las chiquis (llamémoslas CR y CA) y vamos en coche hacia
el aparcamiento específico y reservado para el festival.
Tardamos
muy poco en llegar, estábamos en el barrio de al lado así que diez minutos como
mucho, pero cuál es nuestra sorpresa que NO está señalizado el parking, ni hay
control ni nos piden el código del mismo parking el cual ya habíamos pagado.
Bueno, lo dejamos dentro con el resto de coches esperando que dijeran algo al
respecto desde la organización del festival.
Nos
esperaba un autobús fuera para llevarnos al recinto. Funcionó rápido y bien los
tres días, así que fetén. Al llegar esperamos unos diez minutos de cola
mientras unos cuantos bebían por allí. Vemos la noria desde fuera, escuchamos
el barullo…Ya faltaba poco.
Entramos
y nos encontramos a Milky Chance empezando su concierto. No nos importaba
demasiado este en concreto así que decidimos investigar.
Habían
convertido el aparcamiento de la Caja Mágica es una gran explanada de césped
artificial, bastante limpio (aunque no tardaría en ensuciarse) y de momento no
muy lleno de gente, aunque sabíamos que estaría hasta los topes en el concierto
de los Who. Nos dieron un sombrero amarillo de una promoción el cual no me
quité en todo el día, por muy ridículo que fuese.
Observamos
que la mayor parte de la gente estaba con los trámites de las pulseras en la
zona de la Caja Mágica, muchos con problemas para poder activarla o para poder
recargarla de dinero, aunque este no fue nuestro caso. Ahí fue donde se
produzco el mayor tapón de gente durante todo el festival.
La
señalización era un poco “extraña” en ocasiones (To everywhere ¿WTF?) pero la
verdad es que estaba todo bastante bien distribuido. En la caja vemos la
pequeña exposición de arte, los distintos puestos de venta de ropa y
complementes (y alguna que otra chorrada insulsa) y el pantallote de proyección
de documentales que Avalon les había cedido al festival, muy interesante.
Entre
tanto teníamos que esperar a que CR les diese unas pulseras a unos conocidos, y
también esperar a otro grupo de amigos de las chiquis que venían al festival.
Tras una media hora larga y las presentaciones propias del momento empezó Lori
Meyers su concierto CON EL TEMA QUE MÁS ME GUSTA, en el escenario más lejano a
nuestro punto en ese mismo instante. Aun así CA y yo cantamos un poquito
mientras sonaba EL SEGUNDO TEMA QUE MÁS ME GUSTA, vamos, que justo en nuestro
desplazamiento hacia el escenario me había perdido lo mejor. Esto hay que
destacarlo, la distancia entre los dos “stages” más grandes era mínima pues era
el mismo lugar como tal, pero para ir hasta los de la Caja Mágica la cosa
tomaba demasiado tiempo.
Llegamos
al escenario, no demasiado lleno pues aún no había llegado lo gordo del día.
Dos o tres temas que me sabía y la repetición de Mi realidad por parte de los
granadinos y todos corriendo a coger sitio en el stage de al lado para ver a
los Who.
Los
dos escenarios estaban sobre el césped artificial así que cincuenta metros a la
izquierda ya teníamos a la gente amontonándose. Destacar que el público era bastante
mayor, algunos con su hijo pequeño de la mano y muchos grupos de viejos amigos
que se reencontraban en el concierto.
Todo
comenzó puntual y los Who dieron un concierto increíble. Roger llegó a todas y
el guitarrista la lío con un par de solos tremendos. Todo el grupo termino casi
descamisado y la acústica y el sonido eran muy buenos, todo salió genial y la
gente no podía estar más contenta. Personalmente disfruté mucho con Behind blue
eyes y con Won’t get fooled again, y donde sí que note mucho más apoyo del
público fue con Who are you (lo que tiene CSI) y con My generation entre los
más mayores.
Justo
después de los Who no teníamos nada que nos importase hasta el concierto de
Editors así que decidimos ir a por algo de comer. Aquí reconozco otro gran
fallo y es la falta de personal, o la poca previsión en cuanto a demanda de
comida. Había dos o tres puestos con una cola inmensa y luego otros tres vacíos
(en uno de estos cacé yo unas gyozas). Los precios, caros, pero como todo
festival que se precie. La cerveza un horror así que me pedí una el primer día
y nada más, me inflaría a red bull, eso sí.
Pillamos
sitio en el concierto de Editors al rato. Yo sólo me sabía un tema, aunque sí
era un grupo que me gustaba más que otros. CR y CA ya los habían visto unos
meses antes en Madrid y son grandes fans, así que se lo pasaron pipa. Yo
aguanté de sobra y de nuevo el sonido era bastante bueno, así que genial.
Luego
llegaría mi prueba de resistencia llamada Vetusta Morla. No me gustan nada, no
son mi estilo, se salvan Los días raros porque me la sé a medias y ya. Estas
dos de nuevo cantando a viva voz y yo apoyado a la valla viendo a los grupos de
cuarentonas borrachas dar vueltas sobre sí mismas. Aquí sí que se aprovechó la luminotecnia
del escenario al 100%, pero la interna, ya que durante todo el festival faltó
que el escenario se iluminase por su parte externa, sobre todo unas formas
metálicas que hubiesen quedado genial iluminadas, algo que pensamos los tres.
Salimos
y en nada estábamos en el coche, de nuevo el servicio de buses gratuitos hasta
el aparcamiento había funcionado de lujo. A las cuatro de la mañana estaba ya
en la cama.
Día 2
De
nuevo a las 18:30 me recogen y CA me trae otro muñeco de SuperMario del
McDonalds (tengo media colección). Yo iba casi igual que el día anterior a
excepción de la gorra para evitar quemarme mi precioso coco.
En las
redes sociales del festival comentan los sucedido con el parking el día
anterior, devolviendo el dinero o en su defecto dando la mitad del total a los
que teníamos parking los tres días, genial por parte de la organización. Llegamos
y sí, esta vez había control y nos pidieron el código, todo perfecto.
Nos
plantamos en el festival a medio concierto de Stereophonics. A estas no les
importaba demasiado pero yo sí esperaba tres temas, sobre todo Dakota, que
evidentemente fue el último que tocaran. Me sorprendió su batería, se marcó un
solo tremendo y despertó al público que parecía estar dormido.
Tras
esto fuimos a pillar algo de beber y a dar otra vuelta, los Temples nos daban
un poco igual.
Con
tiempo y tras el refrigerio nos colocamos tumbados a escasos metros del
escenario para ver a Jane’s Addiction. A ninguno de los tres nos molaban
especialmente, pero el espectáculo cobró cierto interés cuando sacaron a dos
gogós colgadas del techo y enganchadas directamente a su piel. Sí, a su piel,
daba demasiado grima y la comidilla fue más eso que la actuación del grupo.
Juanas adicción de nuevo aprovechó la luminotecnia, todo rojo, y el vocalista también
aprovechó para meterse entre pecho y espalda una botella de vino a lo largo de
la actuación.
Después
vinieron Band of horses, a los cuales escuchamos sólo los primeros cinco o seis
temas para ir a coger sitio para ver a The Prodigy. De lejos ya colocados
escuchamos The funeral, un tema que me gusta mucho de ellos.
Centrados
ya en The Prodigy: Hicimos genial en ponernos al lado contrario al que
estábamos acostumbrados, pues estaba mucho más vacío y nos colocamos tras las vallas
de los técnicos de imagen y sonido, dejando delante un pasillito por donde se
movían los de seguridad.
Del
concierto poco puedo decir, fue cojonudo, muchísima energía, mucha luz y el
sonido estaba incluso bajo para lo que podría haber petado. Fue un acierto
coger ese sitio además porque el negrata se nos acercó y pudimos tocarle,
liándola parda mientras tanto. Algún que otro pogo cerca pero sobre todo mucha
mucha energía, dimos saltos a más no poder.
Muchos
se marcharon antes de tiempo para coger sitio para ver a Die Antwoord, pero
nosotros aguantamos hasta el final que, como ya dije, fue tremendo.
Los
sudafricanos tardaron en salir un poco y el público no paraba de invocar a
Yolandi. Finalmente la liaron muy parda aunque, más que musicalmente y bajo mi
punto de vista, fue por su energía y su actuación. Ninja se lanzó tres veces al
público y hubo mucho ambiente de rave por todos lados.
Otro
día fuera, quedaba lo mejor.
Día3
Esta
vez quedamos algo antes, quería ver a The London Souls y pude convencerlas para
verlos. Mucho más calor que otros días, manga corta, un jersey por si acaso
pero pantalón corto. Todo OK.
The London
Souls se la sacaron ante el reducido público que tan pronto había aparecido por
ahí. Nosotros estábamos en segunda fila y tan contentos. Grupo muy recomendable
formado por un dúo, un batería y un guitarra, nada más.
Antes
de que tocasen la última nos fuimos corriendo a coger sitio para ver a Don Gary
Clark.
Al
principio y en segunda fila también parecía que decepcionaba, todo empezó muy
soso y la acústica era mala en el lugar que estábamos. Decidimos ir a por un
refrigerio mientras tocaba. Al volver nos colocamos sentados algo más lejos que
antes pero con una notable acústica. Gary parece que despertaba…Y vaya si
despertó, parecía poseído por el demonio del blues y el Rock&Roll y se
marcó el mejor solo del festival, tocándose temas tremendos. Salí de su
concierto encantado, no pudo haberlo hecho mejor el tío.
Aprovechamos
el siguiente concierto que no nos molaba y dejaba un hueco en medio para probar
la noria y así gastarnos los chelines sobrantes de la pulsera. Mereció la pena
por las vistas y la velocidad que cogió eso.
Al
bajar nos pudimos colocar para ver un poco a Neil Young. De nuevo todo hasta
arriba de gente, algunos muy mayores, en el stage principal. El despliegue
instrumental era enorme, pues hasta tenía un órgano en el escenario. Un tío de
detrás no paraba de gritar que llevaba décadas esperando para verlo en directo,
y por su acento diría que no era ni de Madrid, y como él muchos otros. Tras
Heart of gold y otros cuatro temas nos movimos, el concierto de Neil duraría
más de dos horas así que podíamos movernos un poco, investigar y coger la cena.
Mientras tanto decir que había trabajadores limpiando todo el rato y que apenas
se ensució el suelo demasiado, así que chapeau de nuevo.
De
paso entramos a uno de los conciertos de la Caja Mágica, el único que vimos
allí: Enter Shikari. Estos tíos que yo ni conocía y que yo, ignorante de mí,
pensaba que eran heavys, resulta que eran chavalitos con su camisa y sus
pitillos. Hacían una música de griterío, guitarreo sucio y muchos pogos,
incluso se subió el guitarra a tocar encima del público (sí, encima) y el
cantante en medio de toda la muchedumbre. Vimos el espectáculo sentados y muy
bien la verdad. Los accesos a los conciertos interiores estaban tremendamente
controlados en cuanto a aforo y demás, así que genial.
Al
salir dimos otra pequeña vuelta por el recinto y volvimos para colocarnos en el
concierto de Biffy Clyro, posiblemente el más esperado del festival para los
tres. Tardó bastante el tema del refrigerio porque iban escasos de personal
todavía, el único problema que no subsanaron y ralentizó todo.
El momento
llegó tras el primer red bull, Biffy Clyro en concierto, con algo de retraso
pues Neil Young alargó su concierto media hora más, al final nos perdimos poco
y todo, menudo tío.
De
Biffy apenas puedo decir nada, fue la hostia de principio a fin y nos metimos
en un pogo increíble en Bubbles, casi lloramos con Many of horror y flipamos
con el final. Lo único malo era que mi espalda estaba ya bastante renqueante a
esas alturas de festival...Pero eso no impidió que flipase con los escoceses,
directo de diez. Me sabía la mayoría de los temas así que imaginad la que
liamos todos.
Nos
movimos al otro stage para ver a Two Door. Tras tres temas en un lado del
escenario decidimos movernos al otro y así de paso pillábamos algo de beber, conseguíamos
cierto espacio y preguntábamos sobre la devolución de los vasos (dos euros
pillarlos y uno devolverlo, negocio total). Bailamos mucho con este concierto,
teníamos espacio de sobra y el ambiente era muy Hippie/Happy. El red bull me
hizo efecto y se notó, porque no paramos. Un buen concierto con muchos temazos
y el nuevo single me gustó particularmente.
Después
de aquello poco nos quedaba así que decidimos irnos pronto antes de los últimos
conciertos, así que mientras sonaban Capital Cities y bailábamos nos íbamos
yendo poco a poco. Prontito en casa para hacer balance, recuperar la espalda y
soportar el pitido de los oídos.
En
general, y como balance, decir que ha sido uno de los gastos mejor
rentabilizados de mi vida. Para ser una primera edición los problemas se han
subsanado rápido y la acústica y el sonido eran de notable alto.
Gracias
a las chiquis por hacerme compañía en esta primera andadura, seguro que hay
muchas más.
PD: Perdón por el tocho.
PD: Perdón por el estilo lingüístico y narrativo, por las faltas y la mala puntuación, ya lo revisaré algún día.